Se considera capital privado al flujo de dinero independiente a la financiación tradicional bancaria. Se trata de una gran opción para que particulares y empresas consigan financiación cuando las entidades bancarias no se la proporcionan. Por ejemplo, conseguir financiación para un proyecto de nueva creación, suele ser complicado a través de la banca tradicional. Por tanto, financiarse a través del capital privado suele ser la solución para conseguir el empujón necesario para llevarlo a cabo. Entonces ¿Cómo conseguir financiación privada?
Cualquier persona o entidad que ofrece financiación exige ciertos requisitos para tener un seguro en caso de impago. La forma más rápida de acceder a un préstamo de capital privado es entregando un aval hipotecario. La propiedad debe estar libre de cargas y puede ser de cualquier tipo a excepción de un terreno.
Por otra parte, la documentación a presentar en este tipo de financiación es bastante sencilla: Nota simple del registro de la propiedad, Documento Nacional de Identidad y comprobantes de pagos e ingresos
Ventaja de la financiación privada
La principal ventaja es la flexibilidad a la hora de devolver el capital prestado. Además, es un tipo de financiación que incluso puede llegar a ofrecerse a personas físicas o jurídicas que aparecen en un registro de morosidad.
No obstante los intereses a pagar pueden ser superiores.
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